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nuestra historia

El peregrinaje de

Rodrigo y Keila

Rodrigo asiste y sirve en la iglesia desde que tiene memoria, pero como él diría, decidió ser cristiano a los 17 años. Sirvió por 7 años en diferentes áreas en la Viña Las Condes en Santiago, Chile. Luego, encuentra el llamado de Dios para su vida al dedicar un año de misiones por Sudamérica y Centroamérica, donde Dios le muestra la nación del Perú, y donde queda su corazón. En el 2009 se muda Lima para servir en la iglesia Viña Santa Anita hasta el año 2017. 

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Rodrigo estudió 1 año de Guitarra Eléctrica y luego Arquitectura. Actualmente diseña de forma independiente pero se dedica más que nada al ministerio.

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Keila nació en el ministerio, y desde niña ha estado involucrada en el trabajo de sus padres, plantando iglesias y sirviendo principalmente en la adoración. Vivió en San José, Costa Rica, donde estudió Ciencias de la Comunicación. Mientras vivió allí, sirvió en la Viña del Este y se enamoró de la filosofía de adoración de la Viña. Luego de 4 años volvió a Lima a servir en la Viña Santa Anita. Ha participado en varios discos de adoración, de los cuales 2 son proyectos dirigidos por ella, y ha tenido la oportunidad de cantar junto a artistas reconocidos en el mundo cristiano.

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Keila es licenciada en Ciencias de la Comunicación; especialista en publicidad, RRPP y producción audiovisual. También estudió Diseño Gráfico y música. Actualmente dirige Viña Studios, un ministerio enfocado al desarrollo y producción de adoración para las iglesias.

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Rodrigo y Keila se conocieron el 2007 y como comedia, se cayeron muy mal, pero el cabo de unos meses la amistad creció hasta enamorarse. En 2008 empezaron una relación y en 2009 Rodrigo se muda a Lima para servir en la iglesia local y estar con su amada.

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En 2012 se casan y mudan a Inglaterra, donde trabajaron con el movimiento de iglesias Viña del Reino Unido, donde Dios sembró en sus corazones el gran sueño de ver una iglesia realmente diferente, no religiosa, donde todos eran aceptados, independiente del pasado que alguien pueda tener, y esparcir ese estilo por todo el país.

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Al volver de Inglaterra, trabajaron como pastores asociados en la Viña Santa Anita, desarrollando líderes, y ayudando con el proceso de reestructuración de la iglesia, después de 4 años, en octubre del 2017; fueron enviados oficialmente a plantar una nueva iglesia y en mayo del 2018 oficialmente tuvimos nuestra primera reunión pública.

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Así nace la Viña La Molina.

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